“Camau” Espínola, el mito del eterno retorno
“Zabaleta viene hablando y avanzando con ‘Camau’”. La frase que pertenece a un dirigente del peronismo local marca que se acerca el tiempo de definiciones y la importancia que la figura del exintendente de Capital tiene al momento de discutir candidaturas.
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Carlos Espínola, quien es el dirigente que más mide en la oposición al Gobierno provincial -motivado por la llegada del Interventor del PJ-, salió en las redes con un spot en el que se posicionó como candidato.
Abrió un nuevo espacio “Hacemos por Corrientes”, vinculado a propuestas publicitarias similares a la de los gobernadores de Córdoba y Santa Fe.
“El spot de ‘Camau‘ nos centró en el escenario político, se vuelve a hablar de él. Por primera vez se habló de la oposición y no de Valdés. Por fin tenemos un día que se habló de nosotros y no del oficialismo”, afirmó entusiasmado el senador Martín Barrionuevo.
Ahora, el efecto del mismo rápidamente pasará y las construcciones políticas no se basan sólo en acciones de marketing.
“Camau” rompió su letargo. Dejó el discurso ambiguo y se posicionó como candidato.
El interrogante y las dudas se plantean cuando uno analiza el anuncio. Las imágenes son sólo de Capital.
¿Cuál es el verdadero objetivo de “Camau” en el 2021?
Ser candidato a Intendente es una posibilidad. Zabaleta lo quiere ver compitiendo por el premio mayor, la gobernación. Pero no le disgusta que el peronismo centre la pelea electoral en Capital y sabe que “Camau” es un candidato de peso.
Desde el entorno del medallista olímpico no lo descartan. Se trata de confrontar y posicionarse en un distrito favorable en circunstancias complicadas, pero no imposibles.
Competir por la intendencia en agosto y a los quince días, participar de las PASO, para renovar su banca de senador es una alternativa que analiza y no le disgusta. Sin embargo, en el peronismo la rechazan de plano.
El jueves volverá Zabaleta a Corrientes. Será el tiempo de definiciones, de resolver candidaturas.
En un proceso electoral que ya se inició y en el que los tiempos acotados juegan en contra de poder posicionar dirigentes sin conocimiento en la opinión pública, “Camau” se sabe fuerte, en un peronismo sin figuras taquilleras.
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